En el corazón de España, las Hoces del Río Duratón aguardan como un tesoro natural a ser exploradas.
Este impresionante desfiladero, esculpido pacientemente por las aguas del río Duratón, ofrece una experiencia única para los entusiastas del kayak, el avistamiento de aves y el senderismo.
Os contamos nuestra aventura en kayak a través de las Hoces del Río Duratón, ya que nos adentramos en la majestuosidad de sus altos riscos, descubrimos la fascinante vida de las aves y tenemos la oportunidad de «visitar» el Convento de Nuestra Señora de los Ángeles de la Hoz desde un lugar privilegiado, puesto que la única manera de llegar hasta el monasterio es en kayak.

Embarcarse en kayak por las Hoces del Río Duratón es adentrarse en un mundo donde la naturaleza se presenta en todo su esplendor. A medida que avanzamos por las tranquilas aguas del río, los riscos que se alzan hasta una altura máxima de 159 metros, nos rodean como guardianes de un paisaje que se ha esculpido a lo largo de los siglos.
Una las ventajas de navegar en kayak por las Hoces del Río Duratón es que nos permite apreciar cada detalle de este entorno único. La sensación de serenidad y conexión con la naturaleza es incomparable mientras avanzamos a golpe de remo.
Es importante destacar que esta emocionante aventura solo es posible durante la primavera y el verano, época en la que el agua del río se encuentra embalsada y permiten la navegación.
Pero la verdadera maravilla de las Hoces del Río Duratón la encontramos en el cielo. El majestuoso buitre leonado, con sus alas extendidas y su vuelo elegante, es una presencia constante que parece bailar en las corrientes de aire. El águila real, el alimoche y el búho real también hacen su aparición, añadiendo un toque de misterio a los cielos de las Hoces. La observación de estas aves en su hábitat natural es un privilegio que pocos lugares en el mundo pueden ofrecer.

Nuestro recorrido termina al llegar al Convento de Nuestra Señora de los Ángeles de la Hoz, un lugar histórico que parece emerger entre las paredes rocosas.
Este convento, fundado por los franciscanos en el siglo XIII, es un testigo silencioso del paso del tiempo y la devoción religiosa. Contó con el favor de la reina Isabel la Católica para la reconstrucción después de un derrumbamiento en 1492. Posteriormente Felipe II realizará una ampliación del convento, añadiendo una plaza y una casa de huéspedes. Finalmente en 1835 con la amortización de Mendizábal el convento fue abandonado y la imagen de la Virgen de los Ángeles de la Hoz se trasladó a Sepúlveda.
Actualmente se encuentra en ruinas, aún así, le da a la aventura una pincelada histórica y mística acorde a la importancia que ha tenido este monasterio con el paso de los siglos.
Además de la emocionante experiencia en kayak, las Hoces del Río Duratón ofrecen una serie de miradores espectaculares desde los cuales se puede contemplar la inmensidad de este paisaje natural. Destacan el mirador del convento de la hoz y mirador de la ermita de San Frutos que ofrecen vistas panorámicas inigualables del río serpenteante y los riscos que lo rodean.
Para los amantes del senderismo, las Hoces también cuentan con diversas rutas que nos sumergen aún más en la belleza e historia de este lugar único. Desde senderos panorámicos hasta largas caminatas, hay opciones para todos los niveles de habilidad y deseos de exploración.
Este paseo en kayak por las Hoces del Río Duratón es una experiencia que despierta los sentidos y nutre el alma. No solo exploramos un desfiladero, nos adentramos en un mundo de lleno de vida y belleza.
En nuestro caso hicimos la actividad con la empresa Hoces del Duratón, se encuentra en la localidad de Sebúlcor (Segovia), hasta allí fuimos a primera hora de la tarde y nos llevaron en todoterreno hasta el embarcadero donde comenzaba la aventura. Realizamos la actividad con guía, que nos explico con detalle los secretos que guarda este entorno tanto naturales, históricos, como de la fauna y flora de este paraje natural.
Si realizáis la actividad en verano os aconsejamos realizarla en horario de tarde, la luz es más favorable y la sombra se agradece a la hora de palear en el Kayak.
Si no habéis realizado piragüismo no os preocupéis, aunque hay que remar obviamente, no es una ruta exigente, las aguas son calmadas y las piraguas se manejan con facilidad. Trae ropa cómoda, agua y disfruta de este tranquilo paseo.
Datos:
📍Punto de inicio: Sebúlcor (Segovia)
⏳ Duracion: 3 horas aprox
💰 Tarifas: 30€ afulto/ 20€ niño con guía.
😉 No te olvides de disfrutar
